Productividad Personal
7 prácticas matutinas sencillas para activar tu mente productivamente
AUTOR: Scott Mathews
En fondo, todos deseamos una mejor vida, días más productivos y sentirnos plenamente satisfechos. Después de todo, somos conscientes de que el tiempo que tenemos y las experiencias que podemos vivir son limitadas. Al final, todos vamos a acabar muriendo. Lo que nos diferencia de otros es cómo decidimos usar nuestro tiempo, energía y concentración.
La mañana es el momento más importante del día. Es el inicio de tu jornada en todos cada uno de los días. La calidad de tus mañanas reflejará tus resultados a lo largo del resto del día. Si lo que buscas es productividad, una mañana cuidada que incluya hábitos saludables y una organización efectiva te llevarán lejos.
En el post de hoy, compartiré 7 prácticas matutinas esenciales que preparan tu mente para una productividad diaria. Presta atención a estos consejos, ¡y no olvides empezar a implementarlos inmediatamente!
1. Madruga
El primer requisito para un día productivo es despertarte temprano, seguido de hábitos que ayuden. Ahora, para despertarte temprano, es obvio que te tienes que ir a dormir a horas decentes. Si te duermes a las 10, levantarte a las 5 de la mañana será más fácil de lo que imaginas.
Entre las 10 y las 12 de la noche, la calidad del sueño mejora, y aporta beneficios significativos como unos niveles de energía más altos, una mejora de tus funciones cognitivas y una mejor memoria. Para más información, consulta con algún experto en los ciclos de sueño en los humanos.
Sería recomendable tener una rutina por las noches. Te ayudará a seguir tu horario, y desarrollarás el hábito de irte a la cama a una hora razonable. Evita las pantallas al menos una hora antes de irte a dormir. Este pequeño hábito puede mejorar mucho tu calidad de sueño y tu salud en general.
2. Crea una rutina matutina que te prepare para el éxito
Evitar la toma de decisiones en las primeras horas del día es la mejor manera de asegurar que conseguirás ser productivo y efectivo durante la mañana.
En vez de despertarte cada día de manera caótica, empieza a seguir tu propia y única rutina. Claro está, primero debes desarrollarla, así que aquí hay algunas acciones que puedes hacer nada más despertarte:
- Empieza el día con una afirmación positiva. La gente utiliza “mantras” que inducen determinadas emociones o mentalidades. “Soy excepcional”, “Cada día, soy un poco mejor en todos los sentidos”. Esto son dos ejemplos, pero deberías elegir lo que más te ayude a ti.
- Practica la respiración profunda. Utiliza estos ejercicios para empezar tu día.
- Estira, haz la cama, haz un par de flexiones o sentadillas (no muchas) y sal de la habitación.
- Ignora la tecnología y céntrate en el momento presente.
- Bebe agua de limón, ya que aporta grandes beneficios.
- Dúchate. Mientras lo haces, imagina que el agua se lleva tus emociones negativas.
- Toma un desayuno saludable. Esto es crucial, cuanto más saludable mejor.
3. Cuida tu mente
Preparar tu mente para el éxito es crítico para la productividad que manifestarás el resto del día. Una mente sana y ágil no es innata, y hace falta desarrollarla.
Si tienes el hábito de tratar a tu mente bien durante la mañana, empezarás a pensar mejor, tus emociones darán un cambio a mejor, y se reducirá el estrés que experimentarás durante el resto del día.
Estos son los hábitos que la gente más exitosa realiza durante las mañanas:
- Leer. Incluso si sólo lees una página, ayudas a tu mente a ponerse en forma un poquito cada día.
- Escribir. Llevar un diario es un hábito muy potente que te puede preparar para el éxito cada día. Escribe tus sueños, pensamientos, sentimientos y problemas, y gestiónalos uno a uno. “Transferir tus ideas, objetivos, y tareas del día es una gran manera de limpiar tu mente y ayudarte a trabajar mejor” — Mike Watson, escritor australiano.
- Introspección. Asegúrate de tener tu vida siempre bajo control, practicando la introspección constantemente durante la mañana. El objetivo de la introspección es medir y optimizar tu progreso en la vida.
- Meditación. ¿Con qué frecuencia te dedicas un momento a ti mismo, a sentarte y silenciar tu mente por completo? La meditación es una manera demostrada de mejorar tu bienestar y tu productividad.
4. El ejercicio es obligatorio
Si le echas un ojo a otros 10 blogs que hablen de hábitos matutinos, probablemente veas este consejo en todos ellos. Hacer ejercicio es una manera fantástica de gestionar tu energía. Con gestionar tu energía me refiero a eliminar los excedentes y crear hueco sólo para la energía positiva.
El estrés también es energía, pero negativa. Si haces ejercicio cada mañana, tus días no serán tan estresantes porque tu mente estará preparada para gestionar cualquier problema que surja.
Para asegurarte de que te vas a dormir pronto, madrugar y sentirte lleno de energía durante el día, el ejercicio es obligatorio.
5. Practica la gratitud
¿Agradeces a menudo despertarte? Practicar un momento de gratitud cada mañana es una manera segura de aumentar tus emociones positivas durante el resto del día.
Un momento de gratitud puede destruir cualquier sentimiento y estado de ánimo negativo. Si te centras completamente en lo que te hace sentir agradecido, lo que es bueno en tu vida, te sentirás empoderado y preparado para enfrentarte a cualquier problema que surja. De nuevo, la gratitud es otro consejo muy mencionado en otros “artículos sobre rutinas matutinas”.
6. Planifica tu día
Cuando vas a conducir tu coche, primero necesitas establecer tu destino. Sino, viajarías sin propósito y sin llegar nunca a ningún sitio.
Organizar tu día por la mañana temprano te ayuda a establecer las prioridades de tu vida, a prevenir distracciones, y te mantiene productivo.
Es muy aconsejable que priorices tus tareas de manera efectiva, es decir, no deberías intentar cumplir más de tres tareas exigentes al día. Mucha gente sólo hace una, pero siempre la hace bien. Puedes implementar este hábito en tu rutina diaria, justo antes de ponerte a trabajar.
7. Enfréntate a la tarea más importante del día
Por último, pero no menos importante, enfrentarte a la tarea más importante del día te ayuda a ganar impulso y fuerza para brillar durante todo el día. Consigues una gran satisfacción cuando consigues resolver tus principales retos.
Brian Tracy escribió un libro que se centra explícitamente en este hábito. Se llama ¡Trágate ese sapo! y es uno de los best-sellers de desarrollo personal del momento.
Una de las razones por las que “luchar” contra tu objetivo más difícil del día, es que cuando terminas, ganarás confianza en ti mismo, autoestima y motivación para terminar el resto de tus tareas diarias.
Conclusión
Tomar el control de tu mañana es probablemente lo más importante que puedes hacer para empoderar tu día a día. Para ser productivo, enérgico y centrarte en tus mayores objetivos, trata tus mañanas con más cuidado y responsabilidad.
Recoges lo que siembras — lo que haces durante la mañana impacta el resto de día. Deja de darle espacio al caos por las mañanas — conviértete en el jefe supremo y ¡crea la vida que tú quieres!
2 comentarios
Muy interesante, pero soy una "principiante" en esto del GTD, y 7 hábitos matutinos (divididos en otros más) me parece demasiado... inalcanzable y frustrante pensar que es posible hacerlo ¿si tuviera que empezar por uno o dos, cuál me recomendarías?
Muy interesante, pero soy una "principiante" en esto del GTD, y 7 hábitos matutinos (divididos en otros más) me parece demasiado... inalcanzable y frustrante pensar que es posible hacerlo ¿si tuviera que empezar por uno o dos, cuál me recomendarías?
Hola Victoria,
Estás recomendaciones son generales y no tienen una relación específica con GTD. Quizá la única que puede tener una implicación directa con GTD es la de "planificar tu día", aunque no necesariamente por la mañana temprano, también puede ser al final de la jornada anterior. Yo empezaría por ahí ;)
Hola Victoria,
Estás recomendaciones son generales y no tienen una relación específica con GTD. Quizá la única que puede tener una implicación directa con GTD es la de "planificar tu día", aunque no necesariamente por la mañana temprano, también puede ser al final de la jornada anterior. Yo empezaría por ahí ;)