Productividad Personal
Cómo utilizar una estrategia 3x3 de consecución de objetivos
AUTOR: Emily Williams
Fijarte objetivos es una de las mejores cosas que puedes hacer. Con una meta clara en tu mente, puedes planificar fácilmente tu viaje por la vida con un propósito y significado que te permita realizarte en lo que sea que quieras conseguir. Con esto en mente podrás vivir la vida que quieres vivir.
Sin embargo, fijarse objetivos y hacerlos realidad son dos cosas bastante diferentes. Después de todo, ¿cuánta gente se fija propósitos de año nuevo que luego abandonan a la semana siguiente? Seguro que tiene que haber una mejor manera.
Y para ser breves, sí, la hay.
Hoy vamos a explorar la estrategia 3×3 para el cumplimiento de objetivos, una forma testada de ayudarte a nutrir tus objetivos y aspiraciones para convertirlas en algo real. Allá vamos.
Tres número uno
El primer tres en la estrategia se refiere a los tres principales objetivos que quieres conseguir. Esto significa establecer tres objetivos grandes, no importa cuánto. Debes tener muy claro cuáles son estos objetivos y por qué quieres conseguirlos.
“Esto es muy importante porque muchos de nosotros tenemos un montón de objetivos e intentamos enfrentarnos a 50 a la vez. Simplemente, no tenemos la energía para hacer que eso funcione, y terminamos quemándonos y sintiéndonos abrumados”, dice Sarah Farrow, escritora de tecnología en Australia2Write.
En vez de eso, entre tu lista de grandes objetivos, elige tus tres favoritos en los que quieres trabajar. Éste es tu primer tres. La energía es algo a tener muy en cuenta cuando se habla de objetivos que se quieren cumplir.
En realidad, está más que demostrado que el 20% de tus acciones creará el 80% de tus resultados, lo que significa que necesitas tener cuidado y estar atento en dónde estás empleando ese 20%. Si lo gastas todo procrastinando, perdiendo el tiempo y no estando centrado en tus objetivos, pronto te desconectaras de ellos.
Tres número dos
El segundo tres de nuestra estrategia se refiere a descomponer cada uno de esos tres grandes objetivos en tres objetivos más pequeños. Esto hace que el objetivo sea mucho más gestionable, y mucho más fácil de conseguir. Por ejemplo, si estás pensando en escribir un libro este año, puedes dividirlo y decidir escribir el principio del libro en el primer trimestre del año, la mitad en el segundo y el final en el tercer trimestre.
Poniendo un límite de tiempo creas una presión saludable que sirve no solo para gestionarte mejor, sino para motivarte. Cualquier gran objetivo se puede descomponer en pasos gestionables que hacen que cualquier reto interminable se convierta en coser y cantar.
“Al ser estos pasos más simples de seguir, te sentirás mucho más inspirado para alcanzar estos objetivos y continuar con estos hábitos saludables, en vez de simplemente intentarlo de vez en cuando y sentir que estás fracasando en cuanto llegas al primer obstáculo”, explica Tom Hardy, un especialista en IA de Next Coursework y Brit Student.
Aplícalo a diferentes partes de tu vida.
No necesitas aplicar el plan 3×3 sólo a tus objetivos anuales, también puede ser útil para los mensuales o semanales, e incluso diarios. Es tu decisión con respecto a cómo quieres trabajar en lo que quieres conseguir.
Por ejemplo, si estás escribiendo un libro, usando lo que he mencionado arriba, y divides el objetivo anual en tres partes del año, y estas tres secciones en tres distintas acciones y lo vas accionando a trozos, puede convertirse en algo mucho más fácil de conseguir.
Prioriza tus objetivos
Antes de lanzarte a la piscina y que empieces a trabajar en tus objetivos, cuando estás eligiendo qué objetivos son tus 3 principales, tienes que asegurarte de que estás eligiendo los objetivos más importantes para ti y no hay ninguna razón para que no le dediques el tiempo necesario a pensar en ello y tomar una buena decisión.
No quieres invertir un montón de tiempo y esfuerzo en crear un objetivo para luego darte cuenta de que no era lo más importante para ti en estos momentos, y que hubieras preferido dedicarle el tiempo a otra cosa. Tómate tu tiempo y se paciente con lo que quieres alcanzar. No hay ninguna prisa en cuanto a decidir cómo quieres vivir tu vida se refiere.
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