"Si persigues a dos conejos, no atraparás ninguno." ~ Proverbio ruso
La multitarea es un mito, al menos en el caso del ser humano. Resulta que esa habilidad para realizar varias actividades al mismo tiempo que parecen tener algunos gladiadores de la vida moderna no existe como tal.
Los científicos tienen muy claro que el cerebro humano es incapaz de prestar atención a dos cosas al mismo tiempo. Lo que parece multitarea es en realidad el resultado de un rápido cambio de nuestra atención entre diferentes tareas, un continuo ir y venir que reduce nuestra productividad e incrementa los errores y equivocaciones hasta un 40%.
Cuando hablas por teléfono mientras estás cocinando se producen continuos cambios de tu atención entre la conversación que tratas de mantener y lo que estás haciendo en la cocina. Cuando una sartén gana tu atención porque el pollo que contiene se está quemando, pierdes el hilo de la conversación y le tienes que pedir a tu interlocutor que te repita lo último que ha dicho. Cuando la conversación capta toda tu atención, pierdes de vista el proceso de cocinar y olvidas echarle sal al recipiente del sofrito.
Hacer varias cosas a la vez no es nada recomendable, por múltiples razones:
- Disminuye tu eficiencia. Cuando realizas dos tareas al mismo tiempo tardas más que si haces primero una y después la otra, porque al tiempo que necesita cada tarea tienes que añadir el tiempo que requieren todos los cambios de atención entre una y otra. Por eso es tan efectivo el procesamiento de tareas por lotes.
- Disminuye la calidad de tu trabajo. Los continuos cambios de atención hacen que tu cerebro sea más proclive a cometer errores. Y cuanto más complicadas sean las tareas que estás ejecutando a la vez, más alta será la probabilidad de equivocarte.
- Aumenta tu estrés. Esta forma de trabajo incrementa las pulsaciones del corazón y libera cortisol, la hormona que utilizamos para gestionar el estrés. Además, hace que seas una persona más distante y fácil de enfadar.
- Disminuye tu capacidad de disfrutar. Si te acostumbras a vivir así, tu capacidad de prestar atención a las cosas irá disminuyendo y no serás capaz de disfrutar de muchos de los acontecimientos que hacen la vida interesante.
- La dos últimas razones nos llevan irremediablemente a otra consecuencia: tus relaciones se resentirán.
- Es peligroso. Yo me quemé una vez la mano hablando por teléfono mientras cocinaba unos espaguetis, pero puede ser peor si estás conduciendo en vez de cocinando.
Las interrupciones son el enemigo número uno de tu productividad. Y puesto que la multitarea es una especie de atención parcial con interrupciones constantes, deberías eliminarla de tu vida.
Por cierto, la creencia popular de que las mujeres son mejores que los hombres haciendo varias cosas a la vez, es otro mito. Aunque algunas personas son mejores que otras en ese proceso de atención parcial continuada, no se han encontrado diferencias significativas entre géneros.
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