Productividad Personal
La necesidad de cierre cognitivo y la productividad personal
AUTOR: Francisco Sáez"Resolver problemas es como cazar. Es un placer salvaje y hemos nacido para ello". ~ Thomas Harris
La necesidad de cierre cognitivo es un término psicológico que describe el deseo humano de obtener una respuesta firme a cualquier cuestión, sin dejar espacio a la confusión o a la ambigüedad.
Esta necesidad no es igual en todo el mundo, cada persona tiene un nivel de necesidad de cierre cognitivo. Si estás en la parte alta de la escala tendrás una cierta preferencia por las cosas predecibles, el orden y la organización. Si estás en la parte baja, te sentirás más cómodo en situaciones abiertas y ambiguas, y no te molestará tanto la indecisión. La mayor parte de las personas está, sin embargo, en la zona media de la escala, es decir, valoran el orden pero pueden vivir con cierto nivel de incertidumbre.
Aparte de tu natural predisposición, la necesidad de cierre cognitivo se ve muy afectada por las circunstancias del momento y de la situación concreta. Cuando estás en un entorno muy indeterminado y con demasiada información, o estás presionado por el cansancio o un tiempo limitado, entonces tu necesidad de cierre aumenta considerablemente. A mayor necesidad de cierre cognitivo, mayor estrés.
Esta necesidad puede ser beneficiosa en determinadas ocasiones. Te ayuda a ser más disciplinado en general, y a concentrarte mejor en solucionar un problema bajo una situación de estrés. Puede ser incluso un buen indicador de productividad personal: tomar una decisión detrás de otra, resolviendo cuestiones, se interpreta como algo productivo.
Pero también puede llegar a ser perjudicial. Una fuerte necesidad de sentir que progresas, que eres productivo, puede llevarte a tomar decisiones precipitadas. Si la necesidad de cierre cognitivo es muy alta, se generan situaciones de impaciencia, impulsividad, conflicto y autoritarismo… todo ello acompañado generalmente de decisiones poco inteligentes.
Arie Kruglanski estudió a fondo este fenómeno y creó, junto con Donna Webster, un test de 42 cuestiones para medir la escala de necesidad de cierre cognitivo de las personas. Puedes probar una versión más corta de ese test aquí.
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