Getting Things Done - GTD
Cómo gestionar tu tiempo si eres autónomo
AUTOR: GesTron
La gestión del tiempo es un reto para cualquiera. Sin embargo, si hay un tipo de profesional al que le supone un reto y una obligación al mismo tiempo ese es el autónomo.
Un autónomo es una empresa y, como tal, esa persona tiene que gestionar todos los “departamentos” de la misma: ejecuta sus proyectos, gestiona a sus clientes, busca nuevos proyectos y clientes y además puede llegar a ser el contable y el director de marketing. En definitiva, hace tantas cosas que gestionar el tiempo no es un reto, es algo a lo que están obligados.
Para poder facilitar esa tarea, hoy vamos a daros 6 consejos que deberían de ayudaros a “robarle horas al reloj” y conseguir que el día a día no sea una sucesión de comer, trabajar y dormir.
1. Elige tus clientes con cuidado
La mayor preocupación del nuevo autónomo es encontrar clientes. De hecho, al principio se acepta casi cualquier cosa con tal de ir arrancando y poder comenzar a generar beneficios. Durante un (pequeño) espacio de tiempo esto puede estar bien, para ir entrando en el mercado y acostumbrándote, pero a la larga hay que seleccionar clientes.
Piensa que un proyecto, te genere 2.000€ o 150€, va a requerir el mismo proceso y tiempo de gestión. Si tienes que hablar con el cliente, convencerle, tener una reunión, enviar un contrato o estar intercambiando emails, puede que para ambos clientes tardes lo mismo.
Por este motivo, y por muchos otros como el propio precio que estos clientes están dispuestos a pagar, hay que rechazar proyectos. A veces incluso hay que rechazar proyectos de gran envergadura, ya que si sabes que te van a quitar demasiado tiempo y no merecen la pena a pesar del beneficio económico no hay que aceptarlos.
Además, si ocupas todo tu tiempo con clientes nunca podrás dejar espacio a aceptar otros nuevos. ¿Y si mañana llega un proyecto irrechazable? ¿Dónde lo metes? ¿Vas a aumentar tu jornada laboral? Deja siempre espacio, acepta solo los clientes que sirvan para mejorar tu negocio y nunca mantengas a aquellos que ya no te generan beneficio.
2. Calcula bien tus precios
El tiempo es dinero y si no sabes valorarlo lo estarás tirando. Si no cobras lo suficiente por tus servicios puedes acabar trabajando día y noche para ganar lo justo para vivir y poco más.
Todo el tiempo que pasas trabajando en un cliente es tiempo perdido. Todo el tiempo que trabajas un proyecto, es tiempo que no estás empleando en generar nuevos clientes. Por ello tienes que poner un precio que te de libertad para aceptar tan solo aquello que haga que merezca la pena “perder el tiempo”.
3. Si crees que vas a tardar 2 horas, estima que vas a tardar 4
Seguro que conoces la Ley de Murphy. Pues cuando estimes el tiempo que vas a tardar en ejecutar un proyecto, aplícala. Si algo puede salir mal, da por hecho que acabará saliendo mal y acertarás.
Salvo que sean tareas muy específicas y medibles, siempre hay que dar un margen de tiempo a lo que hayas calculado. Es decir, si piensas que en hacer algo vas a tardar 2 horas, añade media hora, una hora e incluso dos horas de más para no acabar pillándote los dedos después.
4. 4. Di adiós a la multitarea
Tu día debe ser como un armario lleno de cajones desordenados. Abres uno, lo ordenas, lo cierras y pasas al siguiente, pero jamás intentas ordenar 4 a la vez. Hay que dividir el día en tareas y cumplir con ellas.
La multitarea está sobrevalorada y si eres autónomo debes huir de ella como de la peste. Bloquea tu tiempo y céntrate en los proyectos y tareas en sus horas específicas y aumentarás tu productividad.
Recuerda estimar el tiempo generosamente para cada tarea y de esa manera nunca acabarás por trabajar más de la cuenta o pisar unas tareas con otras. Además, siempre te vas a sentir mejor si acabas una tarea antes de tiempo que si lo haces tarde.
5. Bloquea las distracciones
Si tienes que escribir un artículo, diseñar una web o simplemente escribir un correo a un cliente, olvida el resto. No abras a la vez el correo, Photoshop, Twitter, Facebook y tengas el móvil sonando una y otra vez.
Bloquea las redes sociales, si puedes pon tu móvil en modo avión y pon un horario al correo. El correo es el gran enemigo de la productividad, incluso por encima de las redes sociales, y puede destruir toda la planificación de tu día con que lo abras nada más levantarte.
6. Delega todo lo que no sea vital para tu negocio
La Ley de Pareto dice que el 20% de las tareas que hagas generarán el 80% de tus beneficios. ¿Sabes cuál es tu 20%? ¿Estás delegando el otro 80% o gran parte de él? Si no es así, estás perdiendo el tiempo.
Por ejemplo, como autónomo es muy común delegar toda la parte financiera. ¿Va a mejorar tu negocio por presentar tus impuestos o contabilizar tus facturas? No, y por ese motivo se delega. Pagar 50-60€ por una asesoría se convierte en una inversión, más que en un gasto, ya que si en ese tiempo realizas tareas de ese 20% del que hemos hablado generarás muchos más beneficios que esos 50-60€.
2 comentarios
excelentes recomendaciones y basadas en fundamentos teoricos que es lo mejor. gracias por los consejos.
excelentes recomendaciones y basadas en fundamentos teoricos que es lo mejor. gracias por los consejos.
Me alegra mucho que te hayan gustado las recomendaciones Dennis. Espero que te ayuden a mejorar tu productividad :)
Muchas gracias por comentar y a FacileThings por permitirme escribir un post en su blog.
Un saludo
Me alegra mucho que te hayan gustado las recomendaciones Dennis. Espero que te ayuden a mejorar tu productividad :)
Muchas gracias por comentar y a FacileThings por permitirme escribir un post en su blog.
Un saludo