Productividad Personal
Autocontrol y productividad personal
AUTOR: Francisco Sáez“El autocontrol emocional es resultado del trabajo duro, no una habilidad inherente.” ~ Travis Bradberry
En cada persona existen dos modos de pensamiento que han sido llamados de manera diferente por los psicólogos a lo largo del tiempo. Daniel Kahneman, psicólogo estadounidense-israelí, ganador del Premio Nobel de Economía por sus investigaciones sobre el juicio humano y su implicación en la toma de decisiones económicas, describe así estos dos sistemas:
- El Sistema 1 opera de manera rápida y automática, sin apenas esfuerzo ni sensación de control voluntario.
- El Sistema 2 realiza actividades mentales que requieren esfuerzo en el momento que se demandan. Son actividades asociadas a la experiencia subjetiva de actuar, elegir y concentrarse.
La existencia de estos dos sistemas hace que, si tenemos delante al mismo tiempo una tarea cognitiva exigente y una tentación, sea más probable que cedamos a la tentación. El Sistema 1 tiene más influencia en nuestra conducta cuando el Sistema 2 está ocupado.
El autocontrol, que es una de las tareas que ejecuta el Sistema 2, requiere atención y esfuerzo. Se ha demostrado que todas las variantes de esfuerzo voluntario hacen uso de una especie de fondo compartido de energía mental. No se trata solo de una metáfora, parece ser que una actividad mental esforzada hace que nuestro sistema nervioso consuma más glucosa de la habitual (sí, restablecer el nivel de azúcar disponible en el cerebro te puede ayudar a mantener el esfuerzo más tiempo).
La utilización de la voluntad o autocontrol supone un esfuerzo que cansa (agotamiento del ego). Por ello, si nos esforzamos mucho en hacer algo, nos cuesta bastante volver a ejercer el autocontrol con el siguiente reto si está cerca.
Hay una gran cantidad de tareas de todo tipo que debilitan nuestro autocontrol, desde realizar un cálculo matemático algo complejo hasta intentar impresionar a los demás, pasando por inhibir una respuesta emocional en un momento determinado. Y cuando el autocontrol se va agotando empezamos a hacer mal ciertas tareas cognitivas, tomamos peores decisiones, estamos más irascibles y somos mucho más proclives a romper una dieta o hacer una compra compulsiva, por ejemplo.
La conclusión clara es que después de ejercer el autocontrol para realizar una tarea, tenemos menos capacidad de esfuerzo para realizar la siguiente.
Cuenta Kahneman en su apasionante libro Pensar deprisa, pensar despacio que uno de los estudios más impactantes sobre los efectos del agotamiento del autocontrol se realizó con unos jueces de Israel, que pasaron días enteros revisando solicitudes de libertad condicional. El número de solicitudes aprobadas disminuía bastante durante las dos horas antes de la siguiente comida, llegando prácticamente a cero justo antes de comer. Sin embargo, después de comer la proporción de solicitudes aprobadas alcanzaba su valor máximo, un 65%.
La fatiga y el hambre hacen que tendamos a tomar la decisión más fácil, la que requiere menos esfuerzo. El Sistema 1 gana la partida al Sistema 2, que está agotado.
En definitiva, resulta bastante evidente que tanto la autodisciplina como el descanso son cuestiones fundamentales que debes saber gestionar, no solo para mejorar tu productividad personal, sino también la calidad de los resultados.
2 comentarios
Mi experiencia coincide bastante con lo que explicas en el post, Pachi. Y comparto también tu propuesta final: tenemos que aprender a gestionar correctamente nuestra energía mental con descansos adecuados (entre otras cosas), que es lo que en última instancia nos permite mantener un cierto nivel de autocontrol.
Sobre este tema, es interesante saber que hay un sector de la ciencia que ha puesto en duda la teoría del «agotamiento del ego», y parece que hay nuevas pruebas que sugieren que se trata de un mito (el blog no me ha permitido subir enlaces). Y es que el área de la ciencia cognitiva está últimamente más revuelta que nunca. Estaremos atentos a los nuevos descubrimientos.
Mi experiencia coincide bastante con lo que explicas en el post, Pachi. Y comparto también tu propuesta final: tenemos que aprender a gestionar correctamente nuestra energía mental con descansos adecuados (entre otras cosas), que es lo que en última instancia nos permite mantener un cierto nivel de autocontrol.
Sobre este tema, es interesante saber que hay un sector de la ciencia que ha puesto en duda la teoría del «agotamiento del ego», y parece que hay nuevas pruebas que sugieren que se trata de un mito (el blog no me ha permitido subir enlaces). Y es que el área de la ciencia cognitiva está últimamente más revuelta que nunca. Estaremos atentos a los nuevos descubrimientos.
Hola Jero,
Interesante lo que comentas sobre nuevos estudios sobre el "agotamiento del ego". Y sorprendente, por cuanto el libro de Kanehman es relativamente reciente, de finales de 2011. Estaremos atentos, sin duda.
Yo, personalmente, sigo necesitando un descanso cada dos horas de trabajo para rendir adecuadamente ;)
Muchas gracias por compartir!
Hola Jero,
Interesante lo que comentas sobre nuevos estudios sobre el "agotamiento del ego". Y sorprendente, por cuanto el libro de Kanehman es relativamente reciente, de finales de 2011. Estaremos atentos, sin duda.
Yo, personalmente, sigo necesitando un descanso cada dos horas de trabajo para rendir adecuadamente ;)
Muchas gracias por compartir!