Productividad Personal
La enfermedad del tiempo
AUTOR: Francisco Sáez“La falta de dirección, no la falta de tiempo, es el problema. Todos tenemos días de veinticuatro horas.” ~ Zig Ziglar
Larry Dossey es un autor y médico estadounidense cuyas publicaciones resultan un tanto controvertidas por la importancia que otorga, dentro del campo de la medicina, a cuestiones de carácter espiritual que poco tienen que ver con la ciencia. En 1982, Dossey acuñó el término “enfermedad del tiempo” para definir la creencia que tienen muchas personas de que el tiempo está siempre escapando, que nunca hay suficiente, y que tienes que ir cada vez más rápido para mantenerte.
Es evidente que la gestión del tiempo es un tema que preocupa mucho en nuestra sociedad actual, como lo demuestran los 500 millones de resultados que genera en Google la búsqueda del término “time management”. En ocasiones, esta preocupación por el tiempo o, mejor dicho, el modo de vida que resulta de estar siempre luchando contra el reloj, nos termina produciendo problemas físicos reales, tales como el estrés, ansiedad, insomnio, agotamiento…
Los horarios, las agendas, las fechas límite y la rapidez con que debemos hacer nuestro trabajo se contagia a todas las áreas de la vida. Cada vez nos reunimos menos nuestros amigos y esas reuniones cada vez duran menos. La sensación de que el tiempo vuela nos convierte en personas impacientes, que no saben escuchar ni disfrutar del momento presente.
El culto a la velocidad no solo afecta a nuestra salud, también nos hace más infelices y menos productivos. Pero resulta que podemos moderar nuestro ritmo de vida y ser incluso más productivos gracias a ello. Para ello debemos dejar de preocuparnos tanto por el tiempo y aprender a gestionar mejor dónde ponemos nuestra atención. Tomar nuestras propias decisiones sobre lo que hacemos en cada momento de nuestra vida nos pone en el asiento del conductor.
Es por lo que abogan métodos inteligentes de gestión personal, como GTD. Nada de gestionar el tiempo. Se trata de conocer nuestros compromisos, aclararlos y tomar decisiones sobre ellos. De una manera humanizada y con sentido, en equilibrio con todas nuestras áreas de responsabilidad: trabajo, vida familiar, ocio, salud, bienestar, finanzas, desarrollo personal, etc.
No es fácil, pero debemos cambiar nuestra relación con el tiempo. El tiempo no es el enemigo, es la esencia misma de la vida, y debemos aprender a convivir con él e incluso a disfrutar de él.
En vez de vivir cada segundo como si fuera el último, de mirar de reojo el reloj con desaprobación cada vez que las cosas no se hacen “en su momento”, relájate y tómate las cosas con más calma.
Disfruta de una buena comida lenta. Saborea un buen libro. Apaga el móvil y disfruta del placer de estar con tus amigos, con tu familia o con tu pareja. Disfruta de un trabajo bien hecho, tranquilamente pero con pasión y precisión. Deja de pelearte con el tiempo. Disfrútalo.
6 comentarios
"Tomar nuestras propias decisiones sobre lo que hacemos en cada momento de nuestra vida nos pone en el asiento del conductor." Me ha encantado esta frase...!! Y me siento muy identificado con ella pq podría decir que he ido mucho tiempo de pasajero... no de conductor de mi propia vida.
Muchas gracias por compartir esta reflexión. Un abrazo.
"Tomar nuestras propias decisiones sobre lo que hacemos en cada momento de nuestra vida nos pone en el asiento del conductor." Me ha encantado esta frase...!! Y me siento muy identificado con ella pq podría decir que he ido mucho tiempo de pasajero... no de conductor de mi propia vida.
Muchas gracias por compartir esta reflexión. Un abrazo.
Hola Jaime,
Creo que todos hemos estado alguna vez en el asiento del pasajero, dejándonos llevar por las urgencias de otras personas. Tenemos que reducir eso al mínimo: 0,0 ;)
Muchas gracias por comentar!
Un abrazo.
Hola Jaime,
Creo que todos hemos estado alguna vez en el asiento del pasajero, dejándonos llevar por las urgencias de otras personas. Tenemos que reducir eso al mínimo: 0,0 ;)
Muchas gracias por comentar!
Un abrazo.
Me gustó mucho el posicionamiento, y participo de ello. Aunque mayormente ocupe el asiento del pasajero. Creo que importante el cambiar el chip y la idea de vivir como si fuera el último segundo, más bien hacerlo a partir de que es el primero, y con el conocimiento adquirido moldearlo. Después de el primero hay un segundo, y un tercero y.....
Me gustó mucho el posicionamiento, y participo de ello. Aunque mayormente ocupe el asiento del pasajero. Creo que importante el cambiar el chip y la idea de vivir como si fuera el último segundo, más bien hacerlo a partir de que es el primero, y con el conocimiento adquirido moldearlo. Después de el primero hay un segundo, y un tercero y.....
Totalmente de acuerdo, Domingo. Muchas gracias por compartir!
Totalmente de acuerdo, Domingo. Muchas gracias por compartir!
Yo no sé qué es mejor: la herramienta GTD o los artículos de este blog. El actual es maravilloso, trato de vivirlo y enseñarlo. ¡Qué extraño es encontrar estos escritos! Felicidades por difundirlo, por difundir esa literatura, por ayudarnos a reflexionar sobre lo importante para dedicarnos de lleno a ello.
Yo no sé qué es mejor: la herramienta GTD o los artículos de este blog. El actual es maravilloso, trato de vivirlo y enseñarlo. ¡Qué extraño es encontrar estos escritos! Felicidades por difundirlo, por difundir esa literatura, por ayudarnos a reflexionar sobre lo importante para dedicarnos de lleno a ello.
Hola Fernando,
Muchísimas gracias por tus palabras. Este tipo de comentarios me motivan enormente y hacen que valga la pena cada minuto dedicado a escribir :)
Hola Fernando,
Muchísimas gracias por tus palabras. Este tipo de comentarios me motivan enormente y hacen que valga la pena cada minuto dedicado a escribir :)